La naturaleza no es una colección de cosas que existe solo fuera de nosotrxs. Esta idea tan bonita (bueno, todo ese párrafo) está en uno de mis libros favoritos (El árbol, de John Fowles) y quiero compartirla hoy por dos motivos:
Primero, para celebrar el trabajo que han hecho muchas personas para difundir su preocupación por el proyecto del puerto de Tribugá, que implicaría la destrucción de una de las zonas más biodiversas del planeta. Gracias al esfuerzo conjunto de @exptribuga, @naturalezaprofunda, @macuaticos (y muchas personas más, que han apoyado cada paso del proceso), hoy toda esa zona es considerada un Hope Spot (punto de esperanza), que forma parte de la iniciativa de Sylvia Earle y su organización @mission_blue para proteger los océanos, a todos sus habitantes y, por extensión, a todos los seres que existimos gracias a su equilibrio.
Segundo, como recordatorio general, para que cultivemos en nuestros corazones (y cabezas) la certeza de que al cuidar a la naturaleza nos estamos cuidando a nosotrxs mismxs. Preocuparnos —y actuar— frente a las amenazas al equilibrio de los ecosistemas que generan y sostienen la vida en el planeta no es un “pasatiempo”, no es una excentricidad y no es una tontería. Es, posiblemente, una de las cosas más lógicas y más básicas que podemos hacer. No todxs podemos hacerlo de la misma manera, no todxs encontramos la misma información al mismo tiempo ni reaccionamos a ella de la misma forma y con la misma convicción y energía, pero todxs, sin importar qué tan inclinadxs nos sentimos a cuidar nuestro entorno, dependemos de la salud de la biósfera para existir.
Y dejo una frase del libro The systems view of life (otro de mis favoritos, escrito por Fritjof Capra y Pier Luigi Luisi): “Es imposible hablar de la naturaleza sin estar, al mismo tiempo, hablando de nosotros mismos”.
Ahora, pensemos en cómo —como sociedad— solemos hablar de la naturaleza… una cosa lejana, externa, un banco de recursos que podemos explotar sin pensar en qué pasará cuando se agote.
Inventemos otras maneras de hablar de la naturaleza. Nos lo merecemos ♡
¡Y celebremos ese nuevo Hope Spot! Necesitamos muchos más ♡