En vista de que la publicación que hice antes (y que ya archivé) se estaba prestando para malas interpretaciones —y me estaba llenando el inbox de mensajes de gente que piensa que el enemigo soy yo—, hago una nueva versión simplificada:
En tiempos revueltos como estos, las redes sociales son un medio muy útil pero también potencialmente peligroso. Aquí van algunas recomendaciones de cuidado (a nosotrxs y a los demás):
- Evita consumir en exceso imágenes violentas. Es importante mantenernos informadxs, pero hay una línea (borrosa) que separa la necesidad de información con la búsqueda de entretenimiento. Mantente atentx a esa línea.
- Evita compartir esas imágenes de manera irreflexiva. No compartas cosas de las que no tienes fuentes verificadas, que eso solo aumenta la confusión y el miedo.
- Aprende a hacer denuncias que vayan más allá de las redes sociales, que darle “like” a un video con vándalos o con represión policial no es lo mismo que generar verdaderas acciones de resistencia y transformación.
- Ni la salud mental ni el cuidado del planeta son temas secundarios en momentos de crisis. Puede parecer que lo son, pero si observas con atención están profundamente conectados, y cuidar esos aspectos es esencial también en este proceso de cambio.
- Evita las sobresimplificaciones. Son cómodas y fáciles para los “likes”… pero son muy problemáticas. Frente a una crisis sistémica necesitamos soluciones sistémicas, y eso pasa por observar y entender matices, aunque resulten incómodos y aunque requieran que consideres cosas que van en contra de tus percepciones inmediatas.
- Y por favor, deja de buscar enemigos imaginarios. Frente a una crisis como esta no tiene sentido armarle pelea a una persona que no conoces porque dijo algo de una manera que no te gusta o que no consideras completa. Y en todo caso, si algo te parece incompleto: compleméntalo. Crea y comparte ideas, propuestas y acciones que sumen, no te dediques solo a señalar lo que falta. Que todo el tiempo estemos creyendo que las soluciones las deben dar otras personas (y que es posible tener soluciones “completas”) es parte del problema.